En el Génesis XXVIII 10-16 Jacob sueña con una escalera entre la tierra
y el cielo por donde suben y bajan los ángeles, es el Axis Mundi, una
doble vía por donde el hombre aspira a unirse con Dios y Dios baja a
buscar al hombre, esto es un reflejo de la creencia de que en el Paraíso
Terrenal existía originariamente una escalera, que comunicaba
permanentemente al hombre con Dios.
Esta comunicación se interrumpió con la expulsión del Paraíso. Con el
tiempo ha perdurado como símbolo del camino que el ser humano debe
emprender para llegar al reino celestial, los escalones representan las
virtudes que deben ser conquistadas una a una, siendo rechazado por
una serie de demonios tal como se puede ver en los antiguos grabados
de la edad media. En esta época los monasterios cistercienses se
definían como una escalera al cielo “Ecala Dei” pues estaba en el interior
del claustro donde el monje podía llegar al cielo.
En la simbología hermética, encontramos referencias a Ramón Llull el
filósofo que describe en “De Nueva Lógica” en el 1303, una escalera que
lleva a Sophia refiriéndose al conocimiento donde el hombre con la ayuda
del Arte Generalis puede ascender. Echar, escribe lo que hay más arriba
en su insondable deidad corresponde a lo que hay más abajo en la
profundidad de su humildad. En el Antiguo Egipto se encuentran
referencias a la escalera en el Libro de los Muertos; la escalera de nueve
escalones llamada escala de Ra. Del culto a Mitra (1400 a.C. hasta el 274
d.C.) en Roma donde el Emperador Aureliano lo llamó culto al Sol Invictus
prohibido en el 391 d.C. cuando el cristianismo se convirtió en la religión
oficial del Imperio, aunque sus raíces continuaron hasta el siglo XVII,
tanto en el Catarismo como en el Maniqueísmo. De ahí viene la tradición
de la escala de tres, cinco, y siete escalones, significando los diversos
grados de iniciación espiritual, significado todavía vigente hoy en día en
varios ritos.
En la Edad Media los hermetistas representaban este proceso de
crecimiento interior con una escalera de caracol, donde este giro
constante esconde aquello que te encontrarás en la siguiente curva, y que
para continuar ascendiendo se necesita valor, fe y determinación. Es el
símbolo de la auto superación personal.
En las pinturas de los siglos XV y XVI, el primer escalón viene
representado por un dragón significando el pecado y que debe ser pisado
para poder empezar a ascender, la escalera también se puede
representar en sentido descendente donde cada escalón es un vicio, que
nos lleva hacia el reino de los caídos, o hacia la introspección del
inconsciente. Parece ser que la universalidad de este símbolo, sea esta
perpetua ansia del ser humano, que le atrae imperiosamente a ser uno
con la Unidad, esto nos lleva siempre al mismo dilema la relación Hombre
Dios o Cielo y Tierra.
LA ESCALERA