En el anterior artículo (1), se describía la naturaleza de las supersticiones y el efecto que éstas generan sobre las personas supersticiosas. Por la gran influencia que aún tienen hoy en día, parece interesante incluir algunas de las más extendidas, aunque la forma de pensar y los conocimientos actuales, nos conducen a no prestar atención, pero debemos considerar que han estado presentes en el nuestro inconsciente durante muchos siglos, y por poco que profundicemos encontraríamos, que de una manera u otra, no todos estamos completamente libres de ellas, pues muchas se esconden en forma de tradiciones. Aquí veremos algunas de las más significativas. El arroz, cuando se lanza encima de los novios recién casados para desearles prosperidad y abundancia. El Ankh, cruz ansada (del latín, cruz con asa también llamada cruz egipcia), símbolo que muchos utilizan para tener longevidad y sabiduría. Cruz de Caravaca, Originaria de Caravaca de la Cruz (Murcia) en el santuario de la Vera Cruz, amuleto en forma de cruz patriarcal de cuatro brazos con un origen entre el 1230-1250 cuando la población estaba dominada por los musulmanes y Muley Abuceil se convertirse al cristianismo, lo son atribuidos poderes contra el peligro de adversidades y Ias enfermedades. Cruzar los dedos índice y mayor mientras que los otros se esconden bajo el pulgar, es un gesto de protección contra los malos espíritus y también para cuando se dice una mentira para anular sus consecuencias. Escupir desde tiempos antiguos ha sido uno de los gestos más efectivos contra todo tipo de maleficios y se consideraba muy útil para conjurar la mala suerte. La herradura que no tiene nada que ver con la que se utiliza para herrar los caballos, provenía de la antigua Grecia y la introdujeron en Europa los romanos. Los griegos la consideraban signo de buena suerte por el hierro del que estaba hecha; en Grecia todos los amuletos que eran de hierro, servían para ahuyentar el mal, la forma que se lo daban era más bien como una u invertida y por asociación anatómica utilizaba como símbolo de fertilidad. La luz de una vela o de un crisol quemando a un punto de la casa, es símbolo de luz dentro de las tinieblas, aleja todas las malas vibraciones.
RVM
LAS SUPERSTICIONES (2)